Este sitio usa cookies de terceros para brindar sus servicios, personalizar anuncios y analizar el tráfico.
Bienvenidos a Colombia

Actualizado 21-Febrero-2019

Leyenda o Mito La Pata Sola

La leyenda de La Pata Sola, es un relato muy arraigado en la tradición oral de los campesinos colombianos. La Pata Sola es comúnmente representada como el alma en pena de una bella mujer que cuenta con una sola pierna, de mirada hipnotizante y provocativa silueta, que fue condenada a vagar por montes, valles y llanuras por deshonrar a sus hijos e irrespetar a su matrimonio.

En algunas versiones de la leyenda, la Pata sola es un espectro que aterroriza a quien la ve; mientras que en otros, es una astuta cazadora que atrae a sus víctimas con seducción y engaños, para luego destrozarlos.

Cuentan los abuelos, que habita entre la maraña espesa de la selva virgen. Con la única pata (pierna) que tiene avanza con rapidez asombrosa. Es el espanto más temido por colonos, mineros, cazadores, caminantes, agricultores y leñadores.

Algunos aventureros dicen que es una mujer bellísima que los llama y los atrae para enamorarlos, pero avanza hacía la oscuridad del bosque a donde los va conduciendo con sus miradas lujuriosas, hasta transformarse en una mujer horrible con ojos de fuego, boca desproporcionada de donde asoman unos dientes de felino y una cabellera corta y despeinada que cae sobre el rostro para ocultar su fealdad.

En otras ocasiones, oyen los lamentos de una mujer extraviada; la gritan para auxiliarla, pero los quejidos van tornándose más afligidos a medida que avanza hacia la víctima y cuando ya está muy cerca, se convierte en una fiera que se lanza sobre la persona, le chupa la sangre y termina triturándola con sus agudos colmillos.

La defensa de cualquier persona que la vea, consiste en rodearse de animales domésticos, aunque advierten que le superan los perros, calificándolos a todos como animales "benditos".

¿Cuál es la Leyenda de La Pata Sola?

Se dice que este personaje fue inventado por los hombres celosos para asustar a sus esposas infieles, e infundirles terror. Cuenta la leyenda que en cierta región del Tolima Grande, un humilde campesino tenía como esposa una mujer muy linda, vivía con ella junto con sus tres hijos en una parcela que alquilaban.

Cierto día, el dueño de la hacienda deseaba conseguirse una joven compañera con quien tener una relación amorosa clandestina; por lo que llamó a uno de los vaqueros de más confianza para decirle: "...vete a la quebrada y escoge entre las lavanderas la más bella; luego me dices quién es y cómo es...".

El hombre se fue, las observó a todas detenidamente, al instante distinguió a la esposa de un vaquero compañero y amigo, que fuera de ser la más joven, además de la más hermosa. El vaquero regresó a darle al patrón la descripción y demás datos sobre esta bella mujer.

Cuando llegó el tiempo de las "vaquerías", el esposo de la bella relató al vaquero emisario sus tristezas, se quejó de su esposa, pues la notaba fría, menos cariñosa y ya no le arreglaba la ropa con el mismo cariño de antes; vivía de mal genio, era déspota desde hacía algunos días hasta la fecha. Le confesó que le provocaba irse lejos, pero le daba pesar con sus hijos.

El vaquero sabedor del secreto, compadecido de la situación de su amigo, le contó lo del patrón, advirtiendo no tener él ninguna responsabilidad.

El entristecido y traicionado esposo le dio las gracias a su compañero por su franqueza y se fue a pensar a solas sobre el asunto y se decía: "...si yo pudiera convencerme de que mi mujer me engaña con el patrón, que me perdone Dios, porque no respondo de lo que suceda...".

Leyenda La Pata Sola

Luego planeó una prueba y se dirigió a su vivienda. Allí le contó a su esposa que se iba para el pueblo porque su patrón lo mandaba por la correspondencia; que no regresaba esa noche. Se despidió de beso y acarició a sus hijos. A galope tendido salió por diversos lugares para matar el tiempo. Llegó a la cantina y apuró unos tragos de aguardiente. A eso de las nueve de la noche se fue a pie por entre el monte y los deshechos a espiar a su mujer.

Serían ya como las diez de la noche, cuando la mujer, viendo que el marido no llegaba, se fue para la hacienda en busca de su patrón. El marido, cuando vio que la mujer se dirigía por el camino que va al hato, salió del escondite, llegó a la casa, encontró a los niños dormidos y se acostó. Como a la madrugada llegó la infiel muy tranquila y serena. El esposo le dijo: ¿De dónde vienes?. Ella con desenfado le contestó: de lavar unas ropitas. De noche???, corto el marido.

A los pocos días, el burlado esposo inventó un nuevo viaje. Montó en su caballo, dio varias vueltas por un potrero y luego lo guardó en una pesebrera vecina. Ya de noche, se vino a pie para esconderse en la platanera que quedaba frente a su rancho. Esa noche la mujer no salió pero llegó el patrón a visitarla. Cuando el rico hacendado llegó a la puerta, la mujer salió a recibirlo y se arrojó en sus brazos besándolo y acariciándolo.

El enfurecido esposo que estaba viendo todo, brincó con la peinilla (machete) en alto y sin dar tiempo al enamorado de librarse del lance, le cortó la cabeza de un solo machetazo.

La mujer, entre sorprendida y horrorizada quiso salir huyendo, pero el energúmeno marido le asestó tremendo peinillazo al cuadril que le bajo la pierna como si fuera la rama de un árbol. Ambos murieron casi a la misma hora. Al vaquero le sentenciaron a cárcel, pero cuando salió al poco tiempo, volvió por los tres muchachitos y le prendió fuego a la casa.

Las personas aseguran haberla visto saltando en una sola pata, por sierras, cañadas y caminos, destilando sangre y lanzando gritos aterradores. La pata sola, es el alma en pena de la mujer infiel que vaga por montes, valles y llanuras, que deshonró a sus hijos y no supo respetar a su esposo.

Ver una version de la leyenda de la Pata Sola

Video la Leyenda de la Pata Sola

Fuente:

Angélica García - Colombia País Maravilloso

Te puede interesar